Diario de un vampiro: Bill Kaulitz - 11 de Septiembre

Me levanté de la cama mientras sonaba la banda sonora de Indiana Jones en mi despertador. Me había levantado tarde. Fuí al baño, me miré al espejo y...
- ¡Aaaaaah! ¿¡Quién ha sido!?
Fuí al comedor y allí estaban todos. Cuando me vieron, se quedaron todos de piedra excepto uno.
- ¡Tom! ¡Has sido tú!
- Yo no he hecho nada - me dijo intentando poner la cara más inocente que pudo.
- ¡No mientas! ¡Se te ve en la cara!
- Te he dicho que no he hecho nada.
- ¿Cómo te lo has hecho para que no se enterara durmiendo y yo menos? - le preguntó Paul.
- Os dormí con cloroformo - dijo Tom.
- ¡Podría haber muerto! - gritó Paul -. ¡Ahora ya sé de quién es la culpa!
- Un poquito de cloroformo no hace daño a nadie y... ¿Culpa de qué? ¿Y qué es ese sarpullido alrededor de la boca y la nariz?
- És mi alergia al cloroformo.
- ¿Eres alérgico al cloroformo? - le pregunté.
- Sí, una dosis demasiado alta me mata. A ti no te queda tan mal ese color de pelo.
- Es que no es mi color.
- Con lo bien que te queda el rubio - dijo Tom -. ¿Porque renúncias a tu color natural?
- Pensaba que tu pelo siempre había sido negro - me dijo Billy.
- Y lo es. Pero mamá siempre me teñía de rubio para que Tom y yo nos pareciéramos más.
- ¿Tu pelo es negro? - me preguntó Tom.
- Sí. Cómo he dicho mamá me lo teñía. Voy a desteñirme.
Después de desteñirme el pelo, desayunamos todos juntos. Luego, Tom se fue a capturar chicas. Todas lo conocían en Los Angeles. Yo me quedé en casa hablando con mis hermanos.
- Chicos, ¿Cómo fue vuestra primera cita? - les pregunté mientras veíamos la tele.
- ¿A que viene eso? - me preguntó Carlos.
- Tiene algo que ver con la chica que hará de tu "novia" en la peli, ¿Verdad? - acertó Billy.
- Bueno... Puede - dije ruborizado y giré la cabeza para que no me vieran.
- En ese caso - me dijo Satán -, mi primera cita fue con ocho años.
- ¡Venga ya! - dijimos todos.
- Es en serio. Lucifer siempre ha sido una belleza, incluso después de morirse, y nuestra primera cita fue tan romántica...
********** Flashback de Satán **********
Fui a buscarla a su casa en bici. Llamé a la puerta y me abrió su madre.
- Hola Satán. Lucifer ahora baja. Espera un momento - me dijo ella -. ¡Hijita! ¡Satán está aquí!
- ¡Ya voy mamá! - Lucifer apareció por las escaleras, con su melena rubia al viento -. Hola Satán. ¿Nos vamos?
- Eh... Sí, vamos - dije después de salir de la prisión que eran sus ojos.
Le dejé mi casco de bici para proteger su frágil y preciosa cabecita y fuimos al acuario. Cuando llegamos, ella me dijo.
- ¿Esta es la sorpresa que me querías dar?
- Sí, esta es.
- Gracias Satán.
Sonrió. Tenía una sonrisa preciosa. Me ruborizé y sonreí. Entramos al acuario y le enseñé todos los peces que había. A veces me preguntaba porque aquel pez era de esa manera o porque ese otro tenía veneno con lo mono que era. Llegamos a la sección en la que estaban los mamíferos marinos y me preguntó:
- Satán, si estos animales són mamíferos, ¿Porque nadan?
- Porque ellos no salieron del agua cuando las especies evolucionaron.
- Seguro que no tienen que preocuparse de mucho - dijo triste.
- ¿He dicho algo que te hiciera sentir mal?
- No, sólo que mi madre quiere que crezca rápido para que pueda irme de su lado.
- ¿Porque?
- Porque soy un... - se quedó callada y no terminó la frase.
- ¿Un demonio? - le pregunté.
- ¿Cómo lo sabes?
- Porque yo también lo soy. Además el nombre te delata.
- Ahora entiendo las marcas de tu cara - sonrió -. ¿Sabes Satán? Me gustaría ir contigo al colegio y salir del privado en el que estoy.
- A mí también me gustaría ir contigo - susurré.
- Lo he oído - me dijo.
- ¿Lo has oído? - me ruborizé y sorprendí a la vez.
- Sí, lo he oído - me sonrió.
Salimos del acuario y ella me dijo:
- Satán, cierra los ojos.
- ¿Para qué?
- Tú cierralos.
Los cerré y pude sentir que sus labios se juntaban con los míos apenas unos segundos. Cuando volví a abrir los ojos, la vi ruborizada. ¡Era tan mona!
- ¿Te llevo a casa? - le pregunté.
- Si.
La llevé a su casa y luego me fuí a la mía. Nada ni nadie podía quitarme esa sonrisa de bobo que llevaba en la cara.
********** Fin del Flashback de Satán **********
- Ahora entiendo esa cara de bobo enamorado que llevabas ese día - dijo Paul.
- ¡Cursi! - dijeron Carlos, Jorge y Billy.
- ¿Interrumpo algo? - dijo David detrás de nosotros.
- Sólo le estábamos explicando a Bill cómo fueron nuestras primeras citas - le dijo Satán.
- He oído la tuya Satán.
- David, ¿Tú tuviste una primera cita con alguna chica? - le pregunté.
- Sí, pero fue un desastre.
- ¿Le vomitaste encima? - preguntó Paul.
- No, peor. La llevé al cine a ver una película sangrienta para que ella quedara abrazada a mí toda la peli y hacerme el valiente, pero ella lo disfrutó y yo vomité y me desmayé - pusimos cara de asco -. Varias veces. ¿A quién le toca ahora?
- Me toca a mí - dijo Paul.
- Venga diles cómo fue tu "primera cita" - dijo Billy.
- Para empezar todo fue por culpa y gracias a Billy. Nos encerró en el ascensor de un hotel.
- ¿Hotel? - preguntó Billy.
- Vale, fue en un Casino de Las Vegas llamado "Muro de Berlín".
- Ah, si. El casino de tío Sam - dije.
- ¿Tenemos un tío que tiene un casino? - me preguntaron.
- Sí, he ido muchas veces.
- Luego nos cuentas eso - dijo Paul.
- Ahora entiendo porque me confundieron con el sobrino del jefe - dijo Billy -. Y porque pude acceder tan fácilmente a la sala de máquinas de los ascensores.
- Ese sitio mola - le dije -. ¿Habías parado el ascensor con mucha gente dentro durante unos minutos?
- Sí. Una vez subió una mujer que se puso histérica y el resto contaba chistes y se reía. Los tuve media hora dentro y a ellos les pasó cómo si fueran cinco minutos.
- Ya contaremos eso más tarde- dijo Paul -. Le toca a mi primera cita.
********** Flashback de Paul **********
Estaba en el ascensor del casino cuando Cristina entró dentro del ascensor. Me puse en un rincón, intentando evitar que me viera y en ese momento se paró entre dos pisos.
- ¡Oh, mierda! - dije dando una patada al suelo.
- ¿Paul? - me preguntó ella mirándome con esos ojos color azul marino. Al girar la cabeza, su pelo negro rizado había pasado de estar delante de sus hombros a estar detrás.
- Ho... hola... - dije ruborizado.
- ¡Que cambio! No te hubiera reconocido. Cualquiera diría que sólo tienes trece años.
- Ya... ¿Cómo va la universidad...?
- Bien, ya me quedan pocos años para terminar. Y cuando terminé, me declararé al chico que me gusta - mientras decía eso sonrió y se ruborizó.
Bajé la cabeza, vencido por ese alguien a quién ella amaba.
- Paul... - me preguntó -. ¿Hay alguien que te guste?
- ¿A mí? No, nadie. Sólounachicaqueesmayorqueyo - dije esa última frase tan rápido que ni yo la entendí.
- ¿Cómo has dicho? - se sorprendió -. ¿Una chica que es mayor que tú? - ella sí me había entendido -. ¿Es alguien a quien yo conozca?
- Sí, la conoces bastante bien. Sólo te diré que vive en tu casa.
- ¿Te gusta mi madrastra?
- ¡A mí no me gusta mi suegra! - le grité y después le dije más tranquilo -. Tú eres la chica que me gusta.
- Paul, eres demasiado pequeño para mí, aunque por tu aspecto no lo parece.
- ¿Eso significa que...? - me calló con un beso, que se hizo más intenso y...
********** Fin del Flashback de Paul **********
- ... Y tuvieron sexo en el ascensor - completó Billy.
- ¿Enserio? - le dije -. No lo puedo creer.
- Sí, ella estaba enamorada de mí desde siempre - me dijo Paul.
- Y nueve meses después del ascensor nacieron Tomy y Goku - dijo Billy.
- Yo que siempre me había preguntado dónde los habían creado - dijeron Satán y Jorge a la vez.
- Ahora nos toca a nosotros - dijo Carlos.
- Sí, siguiendo el orden nos toca - le dijo Billy -. ¿Quieres contarlo tú o lo cuento yo?
- Cuéntalo tú.
- Carlos, parece que te ha ido bien dormir y "otras cosas que no voy a mencionar" con Billy para recuperar la memoria - le dije.
- Sí, me ha ido bien -sonrió.
- ¡Venga empiezo! - dijo Billy.
********** Flashback de Billy y Carlos (Narra Billy) **********
Quedé con Carlos en ese cine que cerró en el que hacían las películas durante seis meses. Fuimos a ver la última que habían sacado de Star Wars y Carlos se retrasó media hora.
- PErdona Billy, no sabía que ropa ponerme.
- ¿Para ir al cine? - le pregunté.
- Ehm... Sí.
- Vamos, que la sesión va a empezar.
Nos sentamos en la fila de enmedio, ignorando los asientos que ponía en las entradas. No había nadie más que nosotros en la sala. A mitad de la película, Carlos puso su cabeza en mi homboro y...
#### - ¡Alto ahí! - dijo Carlos.
- ¿Qué ocurre? - le preguntó Billy.
- Yo no puse la cabeza en tu hombro, fuíste tú el que, con el brazo, hizo que pusiera mi cabeza en tu hombro.
- Está bien, amor. Rectifico, yo puse la cabeza de Carlos en mi hombro. Sólo quería darle un poco de iniciativa a Carlos ya que...
- Billy...
- Vale, sigamos. ####
Hice que Carlos pusiera su cabeza en mi hombro y me preguntó asustado:
- Billy, ¿Qué haces?
- ¿Estás asustado verdad?
- Me ha asustado más que me cogieras de esa forma, pensaba que eras uno de los malos de la peli.
Aún así, Carlos no se movió de esa posición y aproveché para bajar la mano hasta su culo. Dios que culo tiene.
- Billy...
- Dime.
- Esta situación es algo incómoda...
- Tranquilo, todo está bien - dejé un beso en sus labios y entonces se me echo encima.
#### - Fuíste tú el que se echo encima mío - protesto Carlos.
- Perdona amor, fue un lapsus con nuestra "segunda vez" - dijo Billy.
- Está bien, sigue. ####
... Dejé un beso en sus labios y lo seguí besando cómo si me fuera la vida en ello.
- Billy... Frena... - dijo intentando sacarme de encima suyo.
- Ya no podía contenerme más - le dije -. Carlos, te amo más que a mi propia vida. No puedo vivir sin tí.
- Billy... Yo no...
- ¿Tú no qué? ¿No me amas? - se me llenaron los ojos con làgrimas. Salí de encima suyo. Quería llorar.
- Yo no... Yo no te... - sus ojos también se llenaron de lágrimas -. ¿A quién quiero engañar? ¡Yo también te amo!
Lo besé, no podía ser más feliz en ese instante.
- Entonces, ¿Quieres salir conmigo? - le pregunté.
- Sí, claro que sí.
********** Fin del Flashback de Billy y Carlos **********
- Aww... Que romántico... - dije medio atontado.
- Bill estás atontado - me dijo David.
- No... Que va... - David me dió un empujoncito bastante flojito y mi cabeza quedó apoyada en el hombro de Paul.
- Estás atontado - me dijo Paul al ver que no se me quitaba la cara de atontado que llevaba.
- Ahora me toca a mí - dijo Jorge.
- No - le dijo David -, es hora de comer. Y no creo que Bill pueda cocinar nada en su estado.
- ¿Pedimos comida china? - propuso Satán.
- Hace años que no como comida china... - dije.
- Entonces, no hay discusión - dijo David cogiendo el teléfono.
Quince minutos después, teníamos la comida allí. Yo aún tenía cara de atontado mientras comíamos. Después de comer, ya se ma había quitado.
- Ahora sí que me toca - dijo Jorge.
********** Flashback de Jorge **********
Tenía 16 años. Mi padre me había enviado a estudiar a Barcelona mientras Billy iba a la Universidad de Harvard. El primer día de clase me enamoré del ángel más precioso que he visto en mi vida: Natalia, mi profesora de catalán. Era morena de ojos verde oscuro y tenía 25 años. Hacía de todo para poder estar con ella aunque apenas fueran unos minutos. Me portaba mal en clase, me quedaba hablando con ella después de la clase, aunque tuviera otra y llegara tarde. Hasta que un día me decidí.
- ¿Quieres que vayamos a tomar algo después de las clases? Aunque tendrás que guiarme tú, porque no conozco casi nada.
- Jorge, eres mi alumno, no puedo...
- Fuera del cole no eres mi profesora - la interrumpí.
- Está bien, pero si nos ve alguno de tus compañeros o alumnos que tengo en otras clases, les decimos que te estoy ayudando con el catlán, ¿De acuerdo?
- ¡Vale!
Me llevó al Starbuck's que hay en "Plaça Catalunya" (Nota de Bill: Allí lo pronuncian Plasa Cataluña, pero se escribe de esa manera). Allí pedimos café Mocca y muffins de chocolate.
- Me has traído aquí por algún motivo, ¿Cúal es?
- Esto... Profe...
- No me llames profe.
- Vale. Natalia, hay una chica que me gusta. Seguro que tú ahs salido con muchos chicos, ¿Podrías darme algún consejo?
- Vaya, nunca pensé que un alumno me diría algo así. Lo que podrías hacer es pedirle que vaya contigo a algún sitio y soltarselo de golpe. Si no os conoceis mucho, siempre tienes la opción de insinuárselo.
- Entonces, ¿Querrías salir conmigo?
Natalia abrió los ojos como platos. Yo estaba serio, pero podía notar como la sangre subía hasta mis mejillas para dejarme más rojo que un pimiento.
- Jorge... Tú... Eres muy valiente - cogió mi cabeza por la barbilla y junto mis labios con los suyos.
- Eso... Ha sido... Alucinante... - dije cuando me soltó -. ¿Eso significa que me amas?
- Si, y no podría dejar de amarte.
********** Fin del flashback de Jorge **********
- Y supongo que ya imaginareís lo que pasó esa noche - terminó Jorge.
- ¿Que dijeron tus compañeros cuando la vieron embarazada? - le pregunté.
- Me dijeron que ya había hecho tarde para conquistarla.
- ¿Y qué pasó con ella?
- Sus padres la obligaron a casarse con otro. Me llevé al pequeño Jordi porque sinó lo hubieran dado en adopción.
 - ¿Cómo se llama de apellidos?
- ¿Para que quieres saber tú eso?
- Tú dímelo.
- Natalia Gutiérrez Tanaka.
- Interesante... Madre japonesa - me apunté el nombre en mi brazo izquierdo, debajo del tatuaje.
Ahí terminó nuestra reunión familiar. Cuando me quedé solo, cogí el móvil e hice unas llamadas. Conseguí contactar con Natalia.
- ¿Diga?
- ¿Eres Natalia Gutiérrez Tanaka?
- Yo misma.
- Soy Bill Kaulitz. Te llamaba porque resulta que el alumno del cual te enamoraste es mi hermano gemelo. Me lo dijeron hace poco.
- ¿Eres hermano de Jorge?
- Si.
- ¿Cómo está? ¿Jordi está bien?
- Sí, los dos están bien. Jorge me ha dicho que te obligaron a casarte con otro hombre, ¿Sigues casada con él?
- La verdad es que nunca lo estuve con ese hombre. Estuve con él porque se estaba muriendo y necesitaba atención. La verdad es que yo y Jorge estábamos casados.
- Jorge no me ha dicho nada.
- Él no sabe nada. Conseguí la autorización de vuestro padre biológico porque le conocí, y ahora que vuelve a tener su custodia, el matrimonio es válido.
- Se lo hiciste firmar, ¿Verdad?
- Le dije que era una autorización para las excursiones. El primero sí que era la autorización, pero el resto eran el acta matrimonial.
- Aunque no lo parezca a simple vista, Jorge te echa mucho de menos. ¿Por que no vienes aquí e iniciáis una nueva vida juntos?
- Cogeré un avión esta misma noche y mañana por la mañana estaré en Los Ángeles. Pues claro me refiero al horario de allí.
- Se nota que eres fan. Iré a buscarte al aeropuerto en persona.
- Gracias Bill. Hasta mañana.
- Hasta mañana.
Colgué el teléfono, fui a cenar y luego a dormir. Sabía que Jorge se iba a quedar de piedra cuando lo supiera.
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He aquí el capítulo once. Me voy a dormir.
Gute Nacht!!!!!!


Bill.